Alrededor de 30 años en “Las Torres de La Vega”, la desidia y el olvido eran los imperantes. El hábitat de las familias era paupérrimo, el hacinamiento y la ausencia de los servicios básicos eran la orden del día, cuenta Nelly Espinosa, habitante de esta colectividad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario